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Se acerca el plaza de matriculación en infantil, primaria y secundaria y la diócesis anima a las familias a apuntarse a la clase de religión católica: “Es una asignatura que permite abordar muchos temas actuales de forma amena”
“No es sólo la culturilla popular de saber quiénes eran los profetas o los apóstoles. La asignatura de religión ayuda a entender el mundo en el que vivimos, a empatizar con las personas, a conocernos a nosotros mismos y a trabajar por construir un mundo mejor”. Así se expresa Francisco Palmero Chao, delegado de Enseñanza de la Diócesis de Pamplona. En la semana del 18 al 23 de marzo, las familias de Primaria de la escuela pública deben decir si apuntan a sus hijos e hijas a la asignatura de religión. En la semana del 8 al 12 de abril le tocará el turno al alumnado de ESO y Bachillerato. Desde su experiencia como profesor y como padre de familia, anima a apuntarse a esta asignatura optativa, que se ha adaptado a los cambios de la LOMLOE.
Usted es maestro de Educación física y licenciado en psicopedagogía pero desde sus inicios optó por ser profesor de religión y no de deporte. ¿Por qué motivo?
Yo hacía mucho deporte, era entrenador y me gustaba enseñar a niños, mi idea era dedicarme profesionalmente a ello. Durante la carrera también curse la DECA que habilita para ser profesor de religión. Además en esta etapa de mi vida me involucré en las actividades de la parroquia y de un grupo católico. Iba a las Jornadas Mundiales de la Juventud y era monitor en convivencias. Trataba con muchos jóvenes que tenían sus dudas, inquietudes y sus búsquedas, me planteé que podía ayudarles de alguna forma. Me ofrecieron ser profesor de religión y una vez empecé, me di cuenta de que ese era mi lugar.
¿Conviene tener un mínimo de fe para apuntarse a religión?
La asignatura de religión no es una catequesis. Nunca se examina la fe del alumnado sino los conocimientos. Yo creo que es una asignatura beneficiosa para creyentes y no creyentes. Ayuda a enfrentarse a las grandes preguntas sobre el sentido de la vida y de la muerte, del sufrimiento, de por qué existe el mal. Ayuda a entender mejor el mundo en el que vivimos. Sin los conocimientos de la asignatura es más difícil entender lo que vemos en un museo o entender lo que es Navarra.
Cuando termina el curso, ¿nota que el alumnado es mejor persona?
Yo creo que les hace más libres y responsables. Jesucristo ha marcado la vida de millones de personas con su mensaje de amor y entrega al prójimo. Y tenemos a santos, como nuestro San Francisco Javier, que han entregado su vida por los más necesitados. Intentamos ayudar a nuestro alumnado a que tengan una visión crítica del mundo y no pasen de largo de lo que sucede alrededor, que sean más comprometidos por la construcción de un mundo mejor.
Para muchos la religión debe quedar en la espera de lo privado, de lo personal.
La religión cristiana ha marcado, junto con la cultura griega y el derecho romano, las sociedades occidentales. El arte, música, literatura, costumbres... Esto lo vemos muy cerca. Los Sanfermines y demás fiestas patronales, el Camino de Santiago, las iglesias y ermitas, las tradiciones... Como decía antes la asignatura tiene también un gran componente cultural e histórico.
Algunos padres dudan del rigor histórico o científico de lo que van a estudiar sus hijos.
El curriculum de la asignatura se ha elaborado sobre la base del conocimiento científico y serio. En su elaboración no solo han participado especialistas en teología o en sagrada escritura, sino que también han participado pedagogos, sociólogos, filósofos, historiadores … expertos en diversas materias, todos ellos de reconocido prestigio. El cristianismo se ha estudiado y documentado con gran profusión y lo que se estudia en la asignatura de religión es totalmente equiparable a lo que se estudia en cualquier otra asignatura de las que se imparten en la escuela.
¿Qué novedades supone la LOMLOE para el curriculum de asignatura?
El nuevo curriculum no se centra tanto en los contenidos entendidos de forma tradicional y se centra más en capacitar al alumnado de una forma competencial. En cuanto salió la nueva ley, desde la Conferencia Episcopal, que es la responsable del curriculum a nivel estatal, se desplegó un gran trabajo para en unos meses tener listo el nuevo curriculum. Se trabajan las distintas competencias, personal, social, lingüística, de investigación, de expresión cultural... La asignatura permite tratar un montón de temas, de ciencia, de filosofía, de valores, de economía, de forma dinámica y amena. Para complementar lo trabajado en clase desde la delegación de enseñanza del Arzobispado hemos desarrollado proyectos, encuentros intercentros, salidas culturales… que ayudan a profundizar lo trabajado en clase desde esta nueva perspectiva que marca la LOMLOE. La verdad es que el alumnado disfruta en clase y quieren seguir en los cursos siguientes.
¿Animaría a otras personas a plantearse ser profesores de religión?
Solo en la escuela pública de Navarra hay alrededor de 150 docentes de religión católica, todos debidamente formados. Además del título de magisterio o el grado para dar clase en educación secundaria tienen la titulación habilitante para ser profesores de religión y participan en la formación permanente de forma muy activa. El de religión es un cuerpo docente muy involucrado en su tarea y muy apreciado en los centros educativos. Si les animaría porque los que se dedican a la enseñanza, ya sea de religión católica u otras materias, hacen un gran servicio a la sociedad.