La persecución del cristianismo en Japón

Película: El rebelde (1962) 

Los misioneros jesuitas evangelizaron Japón de 1549 a 1614, año en que fue proscrito el cristianismo en el país. 

En 1865, los misioneros europeos volvieron a Japón y se encontraron con comunidades cristianas. 

Durante esos doscientos años, sin sacerdotes ni obispos, el cristianismo pervivió por la fe que los padres transmitían a los hijos. 

Con solo dos sacramentos (el Bautismo y el Matrimonio), con la lectura del Evangelio, la práctica de los valores cristianos, la catequesis, y la oración en familia se mantuvo viva la fe. 

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