LA JUNTA REDUCE OTRAS 70 HORAS LA RELIGIÓN EN SECUNDARIA
Los docentes advierten de que se masifican las clases porque los alumnos no han bajado
La Consejería de Educación ha decidido, un curso más, reducir las horas autorizadas para la asignatura de Religión Católica en los institutos de la provincia amparándose en el descenso del número de alumnos matriculados en esta materia.
El representante de CSIF en el comité de empresa de los docentes de Religión en Córdoba, Rafael Ruiz, confirmó ayer a ABC que la Administración ha autorizado 929 horas de la materia, lo que supone 70 horas menos que el año pasado. Con esta medida, la Junta sigue la tendencia de cursos anteriores, si bien Ruiz apuntó que este recorte es más leve que las 146 perdidas en el curso 2007-2008, las 237 del 2008-2009 o las 72 restadas el año pasado.
No obstante, la situación del profesorado de esta materia sigue siendo precaria. «La mayoría tiene dificultades para completar un horario de 18 horas, lo que luego se refleja en su salario», indicó el representante de CSIF. «Muchos profesores deben desplazarse a dos o tres centros para tener horas suficientes y aún así la mayor parte tendrá este curso un horario de 12, 13 o 14 horas, como mucho».
La plantilla del profesorado de Religión se ha visto reducida este año a 68 docentes, según Ruiz, ya que siete docentes han logrado una plaza de funcionario en las últimas oposiciones de Secundaria. «La disminución de la plantilla hará que el personal no acuse tanto la nueva reducción horaria, pero aún así, tendremos los mismos problemas de otros cursos», insistió Ruiz.
El representante del comité de empresa afirmó que el recorte en el horario no tiene justificación porque la matrícula en la asignatura no ha descendido, tal y como alega la Consejería de Educación.
Asimismo, apuntó que en los últimos cursos la Junta ha exprimido al máximo el criterio de ratio (alumnos por aula) reduciendo los grupos autorizados y favoreciendo las clases con hasta 33 alumnos, el máximo permitido por la Ley, para quitar horas a la materia.
En estos días, todos los estudiantes de Educación Secundaria y de Bachillerato están realizando en los distintos centros los tradicionales exámenes de septiembre, esas pruebas que les permiten recuperar aquellas asignaturas que dejaron pendientes en el mes de junio, antes de realizar la inscripción para el nuevo curso académico.
Con este motivo, la diócesis sigue animando a los padres, como ya es habitual por estas fechas, a que no olviden, al cumplimentar la matrícula, que sus hijos cuentan con la posibilidad, al igual que en años anteriores, de estudiar la materia de Religión y Moral Católica.
El estudio de esta materia es una forma de adquirir una cultura religiosa y una formación integral, y de construir la persona sobre los grandes valores. Aquellos valores que están desapareciendo y que, en muchas ocasiones, la sociedad desprecia. Es, además, imprescindible para poder comprender aspectos fundamentales de nuestra cultura, arte, tradiciones y costumbres.
A pesar de las dificultades y trabas con las que se está tropezando la enseñanza religiosa en los últimos tiempos, todavía son muchos los padres que, conscientes de su responsabilidad y compromiso cristiano, piden que se impartan a sus hijos estos contenidos.