A lo largo del curso que comienza es bastante probable que uno de los temas estrella en el mundo educativo sea el de los materiales digitales. Encaramos el segundo año de Escuela2.0  y la necesidad de los ODES (objetos digitales educativos) o materiales digitales suscita polémica en la red, en los centros, en los servicios de apoyo... Como muestra de este debate, os invitamos a leer la entrada de Jordi Adell, "Carta a los editores de libros de texto", y la de Manuel Area, "Lecturas, vídeos y ejemplos sobre los  contenidos 2.0 y los libros de texto digitales", sobre este tema.
Desde nuestra labor como asesoras hemos venido manteniendo una postura crítica en relación  con el tema de los materiales didácticos y su concreción más extendida: el libro de texto. Por un lado, en nuestra tradición pedagógica es muy frecuente el apego a este tipo de material y su utilización en las aulas como  fuente de información primordial si no única. El libro de texto es el que cierra y concreta el currículo: marca los objetivos, selecciona y secuencia los contenidos, organiza las actividades y propone los criterios de evaluación. Hasta tal punto esto es así que más de una vez nos ha ocurrido en actividades de formación encontrarnos con la sorpresa de que el profesorado identifica libro de texto y currículo. Este esquema de funcionamiento pone en mano de elementos externos al sistema las decisiones sobre un aspecto básico del trabajo docente: la elaboración o adecuación del material didáctico. En nuestra opinión, se despoja, de este modo, al profesorado de una competencia profesional que por preparación y por su propio perfil le corresponde, quedando así reducido a ejecutor de las decisiones que otras instancias han tomado por él.
Por otro lado, y concretando el tema en los materiales de Lenguas, la mayor parte desarrollan "unidades didácticas" cuya estructura, contenidos y actividades no responden a las premisas del currículo oficial. En efecto, y aunque resulte asombroso, el currículo actual de Lengua Castellana es mucho más avanzado en sus propuestas que la concreción que de él desarrollan la mayor parte de los libros de texto. Estos materiales siguen anclados en una visión formal de la lengua, centrados en el análisis descontextualizado de las unidades del sistema y con un peso conceptual excesivo poco apropiado para promover la mejora de los usos lingüísticos del alumnado.
En un análisis rápido, da la impresión de que con los materiales digitales se están repitiendo esquemas parecidos a los que funcionan con los libros de texto. Asistimos a la proliferación de OBJETOS EDUCATIVOS DIGITALES diseñados y pensados por instancias externas al profesorado que se presentan  como la tabla de salvación para poder sobrevivir en y a la Escuela2.0. Por tanto, el profesorado sigue sin hacer uso de una de las competencias profesionales que se explican en el libro "Diez nuevas competencias para enseñar" de P. Perrenoud, en concreto la competencia de "Organizar y animar situaciones de aprendizaje".
Además, muchos de los materiales digitales de lenguas desarrollan actividades de aprendizaje memorísticas, repetitivas y automáticas con muy poca exigencia cognitiva. Se centran en aspectos gramaticales (ortografía, sintácticos...) desgajados de cualquier uso real de la lengua. A menudo ni siquiera se recurre a la red para llevar a cabo una búsqueda de información, ni se utilizan  herramientas de la web2.0 a lo largo de las actividades que presentan. Como muestra este ejemplo para 3º de la ESO y este otro para 1º.
La necesidad de disponer de materiales digitales en las aulas es una gran oportunidad para modificar esta situación. Por ello, defendemos que los profesores, usuarios normales de las TIC, pueden crear sus propios materiales digitales aprovechando los recursos de la web2.0; unos materiales digitales que respondan, además,  al enfoque comunicativo de la enseñanza aprendizaje de las lenguas, promuevan el aprendizaje activo y contribuyan al desarrollo de las competencias básicas.
Queremos presentar cuatro alternativas diferentes que en nuestra opinión ponen al alcance de cualquier profesor de lenguas la elaboración de un material digital de calidad que aúne el uso de las TIC con un enfoque metodológico apropiado como el de los proyectos, las tareas, etc.
EL BLOG
Los blogs, concebidos para ser diarios digitales, han demostrado una enorme versatilidad que en el mundo educativo les hace ser susceptible de usos didácticos diferenciados. Entre otras cosas, los blogs pueden servir de soporte para la elaboración de unidades didácticas, estructuradas como proyectos de comunicación alrededor de una producción final oral o escrita.
En las diferentes entradas se van colocando las actividades de la unidad con las instrucciones directas para el alumnado. A través de los enlaces se introduce la búsqueda de información en la red o el acceso a explicaciones teóricas. En las entradas se pueden incluir plantillas diversas para orientar la actividad de los alumnos como una hoja de control, plantillas de evaluación, etc., insertándolas como archivos que se suben al blog. Asimismo, en las distintas entradas se pueden introducir fácilmente elementos multimedia: audios, vídeos, etc. Con lo cual se convierten en material multimodal que integra códigos diferentes.
La combinación de las entradas con las páginas estáticas permite diferenciar las actividades de aprendizaje de otro tipo de material como la guía didáctica para el profesorado, el material complementario para saber más o para el tratamiento de la diversidad, etc. Por último, es posible colocar en el mismo blog las producciones resultantes del trabajo de los alumnos utilizando una página específica para ello. Se puede utilizar cualquier sistema de creación de blogs para lo que tenéis un taller de blogs para WordPress y un tutorial para crearlos con Blogger. Podéis ver un ejemplo de material digital elaborado en un blog en esta secuencia dedicada a Antonio Machado a través de la que los alumnos y alumnas deben elaborar una presentación sobre el poeta.
GOOGLE SITES
Esta aplicación para crear páginas web que forma parte del Universo Google es otra oportunidad para crear materiales digitales y multimodales que se pueden estructurar según los principios del enfoque comunicativo. Este sistema tiene una organización similar a la de un wiki por lo que se van creando páginas distintas a las que se accede a través de un menú de navegación y permite igualmente una edición compartida. El esquema de base de las webquest que constituyen verdaderos proyectos digitales, es muy adecuado para llevarlo a cabo a través de un Sites. Cada uno de los apartados de la webquest se coloca en una página y como se pueden adjuntar archivos en cada página, es posible introducir plantillas, elementos auxiliares, etc.
El Sites tiene una gran facilidad de manejo, quizás más que un blog, y el material resultante puede dar mucho juego en las aulas. Está vinculado a todos los demás productos de Google por lo que con una única cuenta se pueden utilizar cuestionarios, documentos de texto, presentaciones, mapas, vídeos... Esta opción es muy recomendable puesto que si se realiza, por ejemplo, algún cambio en una presentación que hayamos incluido en el Sites, este cambio se actualiza automáticamente. Podéis acceder a un Taller de creación de webquest que utiliza esta aplicación. En este enlace podéis ver un ejemplo realizado por una profesora en el que el alumnado como producción debe escribir un cuento de terror.
GLOGSTER
En entradas anteriores hemos hablado del Glog como una herramienta de gran interés para el profesorado en general. En principio, la finalidad más clara de esta aplicación es elaborar un cartel que puede ser el resultado de un trabajo realizado por los alumnos o la presentación de un tema por parte del profesor. Pero, de manera muy sencilla, se puede dar una vuelta a esta finalidad y utilizarlo para proponer proyectos de trabajo o secuencias didácticas.
A partir de las formas para introducir texto se redactan y escriben las distintas actividades que configuran la tarea. La búsqueda de información para realizar las actividades se puede proponer insertando diferentes enlaces a páginas de texto o incluyendo otras fuentes de información como vídeos, audios... El profesorado puede presentar las actividades de manera escrita o grabarlas y presentarlas en audio o de forma audiovisual ya que Glogster permite grabar audio o vídeo de manera online sin necesidad de ningún otro paso intermedio e insertarlo directamente en el glog.
 Asimismo, si se quiere introducir alguna indicación, por ejemplo, los criterios para realizar la revisión del trabajo realizado, es posible hacerlo utilizando un documento escrito mediante Googledocs que se puede "linkar" directamente. Para probar con Glogster tenéis aquí un tutorial. Como muestra podéis ver un glog con una propuesta didáctica sobre las Variedades dialectales y una mini secuencia didáctica , similar a una caza del tesoro, propuesta de Lu Domenech para investigar sobre El  Titanic.
LIBROS DIGITALES
Por último, os presentamos la manera más sencilla para conseguir un material digital. En este caso se trata de la aplicación ISUU.  Utilizando un documento de texto con vínculos a materiales escritos, de sonido o de vídeo, y subiéndolo posteriormente a esta herramienta, se logra un material digital que si tiene detrás un diseño didáctico adecuado, cubre de manera suficiente las expectativas de gran parte del profesorado.
Quizás conviene recordar que muchas de las propuestas de las editoriales no van más allá de esta conversión de su libro de texto en papel a documento en "pdf"o similar. Aquí podéis encontrar un tutorial para su manejo que es muy sencillo y os dejamos una muestra de una unidad didáctica sobre Miguel Hernández, realizada por Sivia González Goñi.
En conclusión, y al hilo de las palabras de Jordi Adell en su conferencia de las Jornadas JEDI " DISEÑO DE ACTIVIDADES CON TIC"  "¿pero se necesitan materiales digitales? Y la red ¿qué es sino un gran almacén de material digital?" parece importante recordar que:
  • el profesorado está capacitado para realizar sus propios materiales didácticos
  • la web2.0 ofrece posibilidades sencillas para que el profesorado realice su propio material digital.
Y quizás... para el profesorado menos animoso sea suficiente con una buena selección de buenas prácticas, un conjunto de tutoriales sencillos y una red profesional en la que compartir dudas, certezas, experiencias...
En el  mundo de lo digital, a veces, se puede caer en la tentación de dar más valor al envoltorio que al contenido. Material digital sí, pero no a cualquier precio.
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