Leoncio Fernández, director de la Fundación SM, explicó que el informe se enmarca dentro de la finalidad primera de la fundación, que es facilitar la investigación educativa. En este sentido, señaló que el estudio busca alejarse de la polémica que suele acompañar a esta asignatura, ya que se centra en “datos cuantitativos”, lo que permite un análisis objetivo de esta realidad.
Elaborado por el Instituto de Evaluación y Asesoramiento IDEA, el estudio analiza la clase de Religión más allá de la controversia mediática y como apuntó Eva Pérez, directora técnica de IDEA, “da a conocer la percepción que tienen los alumnos y alumnas que cursan opcionalmente esta materia, las familias de estos alumnos, y los profesores de esta asignatura“.
Eva Pérez explicó que el estudio se ha realizado con una muestra representativa de estos tres colectivos a nivel nacional, y que abarca centro públicos, privados y concertados, y las etapas educativas de Primaria, Secundaria y Bachillerato.
Entre las conclusiones del informe, el director de la revista Religión y Escuela
destacó que esta asignatura, 10 años después de un informe similar realizado por la Conferencia Episcopal española, no es un asunto problemático para sus protagonistas, que muestran un alto grado de satisfacción con la misma. La clase de Religión la eligen un 72,1% de los alumnos del sistema educativo, según datos del informe anual de la Conferencia Episcopal (curso 2009-2010).
Familias satisfechas |
El autor destacó que un 77,5% de las familias tiene un grado de satisfacción “alta o muy alta” respecto a esta asignatura, lo que supone un incremento de 9 puntos respecto al estudio anterior. El 83% de estas familias se declaran católicas, aunque solo un 25 por ciento de ellas dice realizar una práctica religiosa habitual.
Asimismo, el autor señaló que la mitad de las familias confiesa elegir esta asignatura sin consultar a sus hijos, y subrayó que este dato supone un cambio respecto a los datos del estudio a anterior, cuando eran las familias quienes elegían de forma mayoritaria. Según el informe, casi un 50% de los alumnos elige hoy en día la asignatura de Religión de forma voluntaria. Sin embargo, un 24 por ciento, una de cada cuatro familias, la percibe “como un privilegio de la Iglesia” que viene de tiempos pasados. Carlos Esteban calificó este dato como “preocupante” ya que demuestra que la asignatura no es percibida por la sociedad como una materia renovada, lo cual le resta importancia desde el punto de vista educativo y no se percibe su valor pedagógico.
Según el autor, el 80% de las familias elige esta asignatura por los valores y la cultura que aporta a sus hijos y más de la mitad está a favor de que se aborden todas las religiones en el currículo de esta materia. Respecto a los alumnos, aunque una mayoría se declara católica, el 74 por ciento, existe un 25 por ciento de alumnos que cursan clase de Religión y que no son católicos, incluso un 6% que se declaran ateos. En este sentido, Esteban señaló que este dato es significativo porque “la clase de Religión se dirige a todos los alumnos, no solo a los católicos, y este dato confirma que hay alumnos que la eligen por valores y no por razones de fe“, aunque predominan estas últimas.
Profesores formados |
Un 35 por ciento de los alumnos que cursan esta materia tiene algún tipo de vinculación asociativa a una organización religiosa, y 4 de cada 5 comparten los valores de la ética cristina, están preocupados por la injusticia, la solidaridad y los Derechos Humanos. Respecto a la práctica del aborto y la eutanasia, más del 40 por ciento está en contra, y un 82% rechaza todo tipo de violencia para solucionar un conflicto. En cuanto a la homosexualidad, la mayoría dice que no les supone un problema y un 43% declara tener interés por la política, un dato significativo, según su autor, “en estos tiempos en los que no goza de buena salud”.
Por último, Carlos Esteban destacó el alto grado de formación de los profesores, “todos son titulados universitarios y el 67,5% de los profesores de religión secundaria cuentan con una segunda titulación universitaria”. Además, el 82% utiliza las nuevas tecnologías como recurso didáctico. En esta línea, el autor del informe subrayó que el 70% de ellos se sienten realizados en su trabajo y no lo dejarían aunque pudieran cambiarlo. Respecto al sistema educativo, el 60 por ciento considera que la EGB y el BUP eran mejores, y el 42 por ciento responsabiliza a la LOGSE del fracaso del sistema educativo actual.
La inmensa mayoría, un 75%, está a favor de que todas las religiones tengan presencia en el sistema educativo, y el 40% considera que la clase de religión podía tener un enfoque no confesional, convertirse en una asignatura interreligiosa, y ser obligatoria para todos los alumnos.
Para más información descargar el dossier de prensa pinchando aquí .
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Añade un comentario