El Consejo Escolar vasco ha presentado esta mañana en Bilbao su último 'Informe sobre la educación en Euskadi 2010-2012'.
El organismo, que representa a todos los estamentos educativos no
universitarios en la comunidad (patronales, escuela pública, sindicatos
de profesores y padres), ha analizado tres ámbitos: la planificación; la
evaluación, innovación y organización de los colegios; y la
financiación y los recursos.
En el tercer capítulo, el Consejo Escolar dice que la escuela "goza de un nivel de financiación que, aunque ha registrado ajustes, se ha mantenido en niveles suficientes", y concluye que el sistema educativo vasco "goza de buena salud" a la luz de esos datos entre 2010 y 2012.
No obstante, hace un llamamiento al nuevo Departamento para que "sigan dotando a la educación de niveles de financiación que le permitan mantener, al menos, las tasas de éxito alcanzadas hasta la fecha" y que para ell-.,o "invierta la tendencia negativa en la evolución del presupuesto", que este año, ya en manos del PNV, ha caído un 7%.
La idea destaca por dos cuestiones. Una, porque choca con la normativa vigente (y, desde luego, con la futura 'ley Wert'). Y dos, porque ha sido respaldada, en el marco del conjunto del informe, por Kristau Eskola, la red de centros concertados religiosos que junto con los obispos vascos recurrió un decreto de Educación de 2009 que eliminaba la asignatura alternativa a religión en Bachillerato.
Fuentes de Kristau Eskola, han manifestado después que la asociación no comparte este punto, aunque ha aprobado el informe en su conjunto porque en general le parece positivo.
El Tribunal Superior del País Vasco dio la razón al Gobierno un año después, pero el Supremo falló en su contra en 2012. En el curso próximo, el Ejecutivo autonómico prevé ordenar que religión y su alternativa estén dentro del horario lectivo de todos los institutos. La propuesta de que los centros sean quienes elijan cómo programar la religión es una exigencia vieja de la red de padres de la escuela pública, Ehige.
El Consejo Escolar argumenta que "el tiempo escolar es escaso" y que esta propuesta se basa "en la autonomía organizativa y curricular de los centros" y está "orientada al bien general y a satisfacer los distintos intereses y opciones".
También reconoce "la voluntad decidida de modernización" de la educación vasca y su adecuación a un mundo global, plural y competitivo, y cita aquí cuatro programas 'estrella' del PSE-EE: 'Eskola 2.0' (ordenadores, pizarras electrónicas y materiales digitales), el trilingüismo (plan piloto en un centenar de centros para aprender en euskera, castellano e inglés), la "herramienta valiosísima" de la evaluación externa a los colegios (exámenes de matemáticas, castellano y euskera realizados a todos los alumnos de 4º de Primaria y 2º de Secundaria) y los planes para la "convivencia" en las aulas, especialmente el 'Acuerdo del Carlton' que comprometía a toda la escuela con la educación en la defensa de la dignidad humana tras el "cese definitivo" de ETA.
En lo que respecta a los resultados educativos, se felicita por que, gracias a la evaluación externa (evaluación de diagnóstico impulsada por el Departamento junto con el Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa, ISEI-IVEI), "se han producido mejoras en el conjunto de los centros del sistema". Así, en los resultados de los estudiantes en matemáticas, euskera y castellano, los alumnos han mejorado en 4 puntos en Primaria y en 3 puntos en Secundaria. Además, ha bajado el porcentaje de estudiantes situados en el nivel inferior.
En el ámbito de la financiación existe un debate sobre su escasez o no en el caso de la red concertada, especialmente impulsado por Kristau Eskola, que en las próximas horas verá incorporada una enmienda suya al informe. El Consejo ha intentado analizar las diferencias de financiación entre la red pública y la concertada de forma "cualitativa", y en todo caso pide a las instituciones oficiales que difundan sus cifras sobre este tema "como medio para lograr acuerdos que, a día de hoy, resultan imprescindibles".
Este año, a diferencia de los informes anteriores, el Consejo no ha subrayado que Euskadi tiene unos resultados educativos por debajo de lo que le corresponde en cuanto al nivel socioeconómico y cultural de la comunidad autónoma. La visión ha sido optimista y se ha puesto el foco en otra realidad también muy cierta: que, aunque los resultados no sean excelentes (en algunos casos sí, como en matemáticas en el examen internacional PISA) sino más bien medios, los indicadores de funcionamiento del sistema educativo son muy buenos: bajo nivel de abandono escolar, alto índice de graduados, una FP moderna...
La preocupación del Consejo, en este sentido, es la posible aplicación de la 'ley Wert' (Lomce), cuyos objetivos -entre ellos, atajar el alto fracaso escolar español y modernizar la FP- no coinciden con los indicadores positivos de la educación vasca. En esto los agentes educativos de todo signo parecen mostrarse muy de acuerdo.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2013/06/19/paisvasco/1371644554.html
Otro titular distinto:
En el tercer capítulo, el Consejo Escolar dice que la escuela "goza de un nivel de financiación que, aunque ha registrado ajustes, se ha mantenido en niveles suficientes", y concluye que el sistema educativo vasco "goza de buena salud" a la luz de esos datos entre 2010 y 2012.
No obstante, hace un llamamiento al nuevo Departamento para que "sigan dotando a la educación de niveles de financiación que le permitan mantener, al menos, las tasas de éxito alcanzadas hasta la fecha" y que para ell-.,o "invierta la tendencia negativa en la evolución del presupuesto", que este año, ya en manos del PNV, ha caído un 7%.
La religión
La propuesta más llamativa del informe se refiere a la asignatura de religión. El Consejo pide al Departamento de Educación que dirige Cristina Uriarte que autorice a los consejos escolares de los centros "para que puedan programar la materia de religión fuera del horario obligatorio, con más de una opción horaria, al mediodía o por la tarde".La idea destaca por dos cuestiones. Una, porque choca con la normativa vigente (y, desde luego, con la futura 'ley Wert'). Y dos, porque ha sido respaldada, en el marco del conjunto del informe, por Kristau Eskola, la red de centros concertados religiosos que junto con los obispos vascos recurrió un decreto de Educación de 2009 que eliminaba la asignatura alternativa a religión en Bachillerato.
Fuentes de Kristau Eskola, han manifestado después que la asociación no comparte este punto, aunque ha aprobado el informe en su conjunto porque en general le parece positivo.
El Tribunal Superior del País Vasco dio la razón al Gobierno un año después, pero el Supremo falló en su contra en 2012. En el curso próximo, el Ejecutivo autonómico prevé ordenar que religión y su alternativa estén dentro del horario lectivo de todos los institutos. La propuesta de que los centros sean quienes elijan cómo programar la religión es una exigencia vieja de la red de padres de la escuela pública, Ehige.
El Consejo Escolar argumenta que "el tiempo escolar es escaso" y que esta propuesta se basa "en la autonomía organizativa y curricular de los centros" y está "orientada al bien general y a satisfacer los distintos intereses y opciones".
Buen balance de Celaá
El informe hace un repaso muy positivo de los años en que la consejera socialista Isabel Celaá gobernó la educación vasca. Como punto a favor destaca el aumento de plazas para la educación infantil (0-2 años), aunque ciertos "desequilibrios territoriales".También reconoce "la voluntad decidida de modernización" de la educación vasca y su adecuación a un mundo global, plural y competitivo, y cita aquí cuatro programas 'estrella' del PSE-EE: 'Eskola 2.0' (ordenadores, pizarras electrónicas y materiales digitales), el trilingüismo (plan piloto en un centenar de centros para aprender en euskera, castellano e inglés), la "herramienta valiosísima" de la evaluación externa a los colegios (exámenes de matemáticas, castellano y euskera realizados a todos los alumnos de 4º de Primaria y 2º de Secundaria) y los planes para la "convivencia" en las aulas, especialmente el 'Acuerdo del Carlton' que comprometía a toda la escuela con la educación en la defensa de la dignidad humana tras el "cese definitivo" de ETA.
En lo que respecta a los resultados educativos, se felicita por que, gracias a la evaluación externa (evaluación de diagnóstico impulsada por el Departamento junto con el Instituto Vasco de Evaluación e Investigación Educativa, ISEI-IVEI), "se han producido mejoras en el conjunto de los centros del sistema". Así, en los resultados de los estudiantes en matemáticas, euskera y castellano, los alumnos han mejorado en 4 puntos en Primaria y en 3 puntos en Secundaria. Además, ha bajado el porcentaje de estudiantes situados en el nivel inferior.
Puntos negativos
Como puntos negativos resalta un aumento de la "pobreza en la infancia", un grave problema que debe ser atendido con mayores recursos; la necesidad de aumentar la formación del profesorado en inglés (partida que este año se reduce sensiblemente), las "diferencias importantes entre redes educativas y entre patronales dentro de los centros concertados" en lo que respecta a la matriculación de alumnos extranjeros (pide al Gobierno que establezca "indicadores" para facilitar "una distribución más equilibrada") y la necesidad de profundizar en la cultura de la evaluación, que debería extenderse a los profesores y que debe cuantificarse en objetivos concretos de mejora, le advierten a la consejera.En el ámbito de la financiación existe un debate sobre su escasez o no en el caso de la red concertada, especialmente impulsado por Kristau Eskola, que en las próximas horas verá incorporada una enmienda suya al informe. El Consejo ha intentado analizar las diferencias de financiación entre la red pública y la concertada de forma "cualitativa", y en todo caso pide a las instituciones oficiales que difundan sus cifras sobre este tema "como medio para lograr acuerdos que, a día de hoy, resultan imprescindibles".
Este año, a diferencia de los informes anteriores, el Consejo no ha subrayado que Euskadi tiene unos resultados educativos por debajo de lo que le corresponde en cuanto al nivel socioeconómico y cultural de la comunidad autónoma. La visión ha sido optimista y se ha puesto el foco en otra realidad también muy cierta: que, aunque los resultados no sean excelentes (en algunos casos sí, como en matemáticas en el examen internacional PISA) sino más bien medios, los indicadores de funcionamiento del sistema educativo son muy buenos: bajo nivel de abandono escolar, alto índice de graduados, una FP moderna...
La preocupación del Consejo, en este sentido, es la posible aplicación de la 'ley Wert' (Lomce), cuyos objetivos -entre ellos, atajar el alto fracaso escolar español y modernizar la FP- no coinciden con los indicadores positivos de la educación vasca. En esto los agentes educativos de todo signo parecen mostrarse muy de acuerdo.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2013/06/19/paisvasco/1371644554.html
Otro titular distinto:
El Consejo Escolar de Euskadi propone sacar Religión del horario lectivo
http://www.deia.com/2013/06/19/sociedad/euskadi/el-consejo-escolar-de-euskadi-propone-sacar-religion-del-horario-lectivo-
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